¿Cada cuánto utilizas los electrodomésticos de tu cocina? Por supuesto, a diario, incluso en repetidas ocasiones. Pero no por ello los entendemos mejor o los sabemos utilizar a la perfección. Y es que hay fallos muy comunes, que nos dejan en «fuera de juego» y que no nos permiten sacar el potencial de estos electrodomésticos. Además, si no los utilizamos de forma correcta, es posible que se estropeen antes de hora y tengamos que cambiarlos por sorpresa.
En Decoyba te presentamos algunos de los errores que debemos evitar al usar electrodomésticos:
1.- Guardar comida caliente en la nevera
Craso error. Quizás eres de los que ya lo tiene interiorizado y nunca se te ocurra meter un guiso caliente en el refrigerador aunque todavía suele ser frecuente guardar allí platos que aún no se han enfriado del todo. Esta acción hace que la temperatura del electrodoméstico suba considerablemente por lo que el gasto de electricidad aumenta con lo que ello conlleva.
2.- Enjuagar los platos antes de meterlos al lavavajillas
A priori puede parecer que si tras comer, los platos quedan demasiado sucios, sea una buena idea ponerlos un rato debajo del agua antes de meterlos en el lavavajillas. Pero este simple gesto, que puede tener parte de sentido para evitar que restos de comida entren en el electrodoméstico, supone también un importante gasto de agua, de una media de 12 litros aproximadamente. Esto lógicamente no es bueno y debemos evitarlo.
3.- Abrir el horno para comprobar la cocción
Otro error común en los hogares es el de abrir el horno durante la cocción de un alimento para comprobar su estado, pero no todos los hornos son iguales.
Hacer este gesto para ver como avanza la cocción hace que la temperatura interior baje entre 25 y 50 grados. Cada vez que se hace, se pierde un 20% de la energía según la guía online IDAE para ahorrar el consumo en el hogar. Además, como consecuencia, el gasto eléctrico será mayor, ya que será necesario tener el horno encendido por más tiempo. También se recomienda apagar el horno unos minutos antes de finalizar la cocción, ya que el calor residual será suficiente para acabar el proceso.
4.- Colocar las cucharas con la cara hacia abajo
Si queremos que los restos de comida se eliminen bien de las cucharas y del resto de los cubiertos, es necesario colocarlos correctamente. Esto supone meterlos en las barquillas dispuestas para ello, ya que de otra manera pueden bloquear la salida del agua. Los cuchillos deben
situarse con el mango hacia arriba para evitar pinchazos, mientras que las cucharas y los tenedores deben ir al revés, con las cabezas hacia arriba. Y uno de los errores más repetidos es el de colocar mal las cucharas así que ya lo sabes. Colócalas hacia arriba y deja el espacio suficiente entre unas y otras para que el agua circule bien.
5.- Llenar la lavadora en el orden equivocado
Fabricantes especializados calculan que a la semana una familia pone hasta cinco lavadoras. Es probable que ya sepas que es conveniente separar la ropa blanca de la de colores, para evitar desteñidos. Incluso es posible que la laves por tipo de tejido, ya que unos resisten temperaturas más altas que otras. Pero, ¿en qué orden rellenas el aparato?
Para que se lave mejor, lo más indicado es ubicar la ropa más sucia al fondo y dejar el resto para la parte superior. Es un error bastante común hacerlo en un orden incorrecto.
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