La reforma de la cocina o el baño es una ocasión ideal para invertir en equipamientos más rentables en términos de eficiencia energética. Aprovechar esta reforma de la cocina o el baño para renovar las instalaciones revaloriza la vivienda y ahorra dinero y problemas ya que en la práctica supone aprovechar las obras de reforma en el hogar para anticiparse a posibles averías en el futuro.
Renovar las instalaciones de las estancias de más uso del hogar es invertir en seguridad y confort, igual que sustituir la bañera por un plato de ducha es una de las obras más comunes para ganar en comodidad y accesibilidad.
Además, si estás pensando en reformar la cocina o el baño, ten en cuenta que minimizar las juntas en la cocina y el baño con revestimientos continuos o baldosas de gran formato facilita la limpieza de las paredes.